Fundación EDES organizó unas jornadas contra la despoblación rural en Villayón los pasados días 27 y 28 de octubre bajo el título «El acceso a la vivienda, otro gran reto a resolver en la lucha contra el despoblamiento». Durante la jornada del viernes disfrutaron de diferentes presentaciones, experiencias y reflexiones con un denominador común: es posible empezar a poner freno al abandono de nuestros pueblos y revertir la curva, implicándonos
en buscar soluciones, tanto desde el sector público como desde iniciativas privadas.
Fermín Bravo, director general de Vivienda del Principado de Asturias, Estefanía González, alcaldesa de Villayón, Ana Suárez, presidenta de la Asociación de Mujeres de Villayón, Sonia Barrero, vicepresidenta de la Fundación Edes, Mª José Perera, gerente del área de Desarrollo Somontano, Beatriz Celma, técnica del programa Somontano Alquila y Mario Pérez y Jose Luis Pérez, representantes de la Asociación Casa Rigueiro expusieron las dificultades, pero sobre todo, soluciones para este acceso a la vivienda.
Fermín Bravo y Estefanía González coincidieron: en las áreas rurales es fundamental tener claras las necesidades y fijar bien los objetivos a la hora de gestionar el acceso a la vivienda pública. Ana Suárez y Sonia Barrero expusieron la necesidad de mantener vivos los pueblos, las relaciones vecinales (que necesitan vecinos y vecinas) y sus potenciales para una vida comunitaria y más enriquecedora. Si nuestros pueblos se vacían, ¿cómo mantener los servicios que necesitan sus pobladores?, y para las personas con mayores necesidades por edad u otras causas, ¿cómo vamos a generar cuidados y oportunidades para ellas? Por su parte, Mª José Perera, Beatriz Celma, Mario Pérez y Jose Luis Pérez compartieron soluciones para el uso de vivienda privada.
También compartieron el espacio con tres parejas que han elegido Villayón para emprender un nuevo proyecto de vida, dejando atrás (o a un lado) sus ciudades de origen, trabajo, círculos… de la mano del programa contra la despoblación de COCEDER y su plataforma Volver al Pueblo para empezar, pero junto a los vecinos y vecinas de Villayón que son los que realmente les han enganchado. Entre todos dejaron constancia y permitieron tomar buena nota de que «si se quiere, se puede«.
La sorpresa mayor la dieron los niños y niñas del Colegio Rural Agrupado San Pedro de Villayón, que tras estudiar la disminución de la población, de las viviendas, de pensar sobre los motivos e idear soluciones, demostraron que ellos y ellas, además de estar orgullosos de sus pueblos, lo que quieren y esperan de los adultos es que se pongan manos a la obra para frenar este abandono.
David García, técnico responsable de este área de trabajo en la Confederación de Centros de Desarrollo Rural, COCEDER, cerró la jornada, compartiendo la misión de COCEDER con 40 años de trayectoria: trabajar con la comunidad rural en procesos de desarrollo integral y sostenible, en coordinación con otros agentes sociales del territorio para generar mejores condiciones de vida de la población rural y de su medio.
Así se terminó con esperanza porque hay alternativas. Y con la responsabilidad de no mirar para otro lado. No se trata de un problema tan sólo geográfico o político, sino que tiene afectaciones a nivel social, ambiental, humano, económico, … y para revertir la situación, no podemos ni debemos dejar sólo en manos de otras la solución, sino que tenemos que implicarnos en buscar y poner en marcha soluciones.
Gracias a Verónica Bermúdez y Fernando García, del Centro de Voluntariado y Participación Social, y a COCEDER, por estas jornadas, y a las personas que respondieron a la llamada y compartieron sus preocupaciones y propuestas de solución… probadas y que están funcionando.
Recordamos que la plataforma www.volveralpueblo.org es una iniciativa de la Confederación de Centros de Desarrollo Rural, COCEDER como parte de programa, “Sensibilización y concienciación de la despoblación y la necesidad de emprendimiento en el medio rural”, financiado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.
Fundación Edes lleva desde el año 2018 dentro de este programa. A lo largo de estos años han contribuido al asentamiento de más de diez unidades familiares y, en este momento, se encuentran en un momento de alta demanda, tanto de personas que quieren venir a vivir a la comarca, como de personas de la comarca que contactan para lograr atraer a determinados perfiles profesionales que no logran cubrir con la población local. El asentamiento de nueva población es un proceso complejo, pero si queremos mejorar nuestras comarcas rurales y nuestras vidas como habitantes de las mismas… no podemos esperar a que lluevan los cambios, tenemos que ponernos manos a la obra en ellos.