El CDR La Safor, a través del Área de Sostenibilidad del Territorio que engloba los programas de lucha contra el despoblamiento, emprendimiento rural y la Oficina de Vivienda Rural, vuelve a poner en marcha por los pueblos de la Safor y otros comarcas vecinas un taller que aborda cómo se vivía y cómo se vive en los pueblos, y cuáles son los factores que hacen posible que se habitan.
Este taller está dirigido a todos los públicos y edades ya que lo que se pretende es abrir un debate intergeneracional entre el vecindario de cada pueblo –con diferentes edades, necesidades y puntos de vista– para dialogar en torno a cómo se ha conformado y se sigue conformando la vida en los pueblos.
Con este taller lo que se pretende es abrir el debate en torno a la historia más reciente del pueblo, la de los últimos 50, 60 o 70 años hasta la actualidad, teniendo en cuenta todo lo que hacía posible la vida en los pueblos en el pasado y todo lo que la hace posible ahora. Cómo se vivía, cuáles eran los sectores productivos, oficios o trabajos que daban trabajo y asentaban a la población, cuáles eran los servicios públicos existentes, las formas de ocio, cómo se habitaban las casas o con cuánto se vivía, entre de otras cuestiones, serán las que ocupen gran parte del debate.
El CDR La Safor, además de recoger la información y los testimonios de las personas asistentes, acompañará el diálogo intergeneracional lanzando preguntas y elaborando reflexiones en torno a los factores clave que hacen posible habitar un pueblo, así como presentará la labor que está realizando para desbloquear los recursos que permiten habitar los pueblos, la incidencia que está realizando sobre los problemas generales que perjudican la vida en ellos y el trabajo de intermediación para que las personas que lo habitan puedan seguir haciéndolo y para que nuevas personas y familias puedan asentarlo en ellos y ayudar al relevo generacional.
Este taller se realizó en los pueblos del Valle de Vernissa el pasado verano, puesto que es la zona de la comarca más afectada por los procesos de pérdida de población y de los tejidos económicos propios. Ahora, vuelve a realizarse en los pueblos de menos de 2000 habitantes de la comarca de la Safor, aunque no sólo, puesto que se está empezando a trabajar con otros territorios cercanos a la comarca, como la Vall d’Albaida , el interior de la Marina Alta o el Condado, que también presentan problemas demográficos de pérdida de población.
En este sentido, durante la última semana de marzo y la primera de abril, aparte de realizarse en Ador, Beniarjó y Rafelcofer, el taller también se realizará en el Vall d’Ebo, pueblo con el que el CDR La Safor ha estado trabajando desde hace unos meses para afrontar la problemática del incipiente despoblamiento que sufre, así como para atraer a nuevas personas y familias pobladoras allí, principalmente con el objetivo de reabrir la escuela.
Todos los talleres se realizarán a las seis de la tarde y están programados para las siguientes fechas y lugares: en Ador se realizará en la Biblioteca el próximo lunes 27 de marzo, en la Vall d’Ebo se realizará el martes 28 de marzo en la Sala Polivalente, en Beniarjó se realizará el lunes 3 de abril en la Sala de Exposiciones, y en Rafelcofer el martes 4 de abril en el Centro Social. Habrá también merienda.
¿Por qué la historia más reciente?
Desde el Área de Sostenibilidad del Territorio del CDR La Safor se ha estado trabajando en la cuestión de la habitabilidad de los pueblos, es decir, de las relaciones y factores que posibilitan que un pueblo se habite o se deshabite, y de cómo los cambios socioeconómicos, urbanísticos y culturales de las últimas décadas, a pesar de haber sido de los más bruscos de la historia, no se han recogido o analizado. Por ello, los talleres también pretenden recoger ese pasado y memoria reciente, a través de la memoria oral de las asistentes, para poder analizarla y evaluarla después.
Las reflexiones que nacieron de los talleres realizados en los pueblos del Valle de Vernissa llevaron a concluir que el estilo de vida, tal y como se entendía hace 60 o 70 años, ha experimentado unos cambios muy bruscos desde entonces hasta el actualidad: el paisaje, el urbanismo, el sector primario u otros oficios, las costumbres comunitarias de ocio o los servicios públicos, entre otros, han cambiado, ya sea para mejor o para peor, como es el transporte público, y han remodelado la vida de los pueblos.
Por otra parte, la inercia del progreso, tanto la mejora de los servicios, el aumento del nivel adquisitivo o del acceso a muchos bienes y servicios, no ha dejado mucho espacio para mirar atrás, reflexionar y valorar, en un ejercicio de conciencia colectiva, qué cosas realmente han ido a mejor y cuáles no, y cuáles debería mantenerse y qué otras incidir o cambiar. Como, por ejemplo, la devaluación y progresivo abandono de la agricultura y la ganadería, principal eje de la economía y el abastecimiento de los pueblos en el pasado. Un sector clave, que asegura el abastecimiento alimentario y la custodia del territorio, que debería volver a ponerse en valor y recuperarse a través de la facilitación de las condiciones y oportunidades necesarias para que la gente joven pueda ocuparse.
En definitiva, con estos talleres, y a través del diálogo abierto entre el vecindario de cada pueblo, el CDR La Safor pretende reflexionar también en torno a esos cambios bruscos del último medio siglo: cómo han configurado la vida, cómo ha afectado todo esto a la idiosincrasia de los pueblos, que a menudo han copiado dinámicas de las ciudades, qué cosas han mejorado y cuáles han empeorado, así como qué es lo que se necesita para seguir habitando los pueblos durante muchos siglos más.
El programa de lucha contra el despoblamiento, emprendimiento rural está subvencionado por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030. Y la Oficina de Vivienda Rural por la Consejería de Participación, Transparencia, Cooperación y Calidad Democrática.